Günter Petrak escribió recientemente una colección de cuentos que yo llamo atrevidos, como en el sexo de ventanas abiertas, denominado Eros desarmado, que habré de reseñar en las subsecuentes líneas por el interés de los frenesíes desbordados que despiertan en mí, sus líneas.
En cuanto supe de su presentación y no pude asistir a ella, corrí a comprarlo. Estuvo en mi mesa un par de meses (por exceso de trabajo) y un día que olvidé completar el recibo de luz, me la cortaron. En un solo día terminé de leerlo y apuntar para ustedes algunas de mis ideas al respecto. Antes de relatarles esos detalles, debo decir que Günter Petrak ha resaltado en el cuento, participando en varias antologías y obteniendo importantes reconocimientos; supongo que además, ha ganado dinero por la venta en millares de sus libros de redacción. Aunque dudo que eso sirva de mucho en el mercado de los libros, habla en realidad de la calidad de sus escritos. Tiene publicada una novela de nombre: Ciudad de otros y otros tres libros de cuentos (El mar azul de sus ondulaciones, Para leer la tarde, Los hombres de maíz y otras historias).
La obra te acerca a oler el clítoris y a besar el cuello de una amante de ocasión. Sus palabras son un lente de largo alcance, con una mirada de francotirador, apuntando con precisión milimétrica los momentos que congelan el corazón de sus personajes y, arremolinados en ello, los lectores que vemos sin tapujos las vidas de otros en una plancha de autopsia.
Creyendo que la mitología rodeaba las letras de este libro, con una portada en donde las alas de cupido y sus flechas se encuentran abandonadas, Günter nos confina a la época de la Colonia, en un primer cuento que se llama “Lucina” y en donde el protagonista se ve envuelto en un romance inesperado: José de Samaniego. Desde el primer día la besó con pasión y en espera del desenlace ante una fornicación más temprana, nos vamos encontrando con su mundo académico; en rompimiento franco del espacio vital del personaje, compartimos la desdicha de sus malogradas investigaciones. Ahí Lucina aparece para llevarle a un vuelco inesperado que cuestionará las neuronas desde el escaparate. Dejará por horas esas inquietudes en las que no siempre pensamos. Sentirás como nunca, la sensación de retomar las líneas para refrescar esas congojas una vez más.
Entonces, elucubrando cuáles son los mensajes ocultos de ese cuento, ya nadas en el siguiente: “Verano”. ¡Madre mía! Qué cuento. Presionó mis párpados al más obtuso ángulo que he tenido en años. ¡Miren que para sorprenderme hace falta demasiado! Si de repente me sentí la mucama de un motel en el que recogía del suelo los pantalones del hombre y el sostén de la mujer; como metiche hasta su cama, como si la pasión fuese mía. ¡Un cupido entrometido! De verdad que pocas veces en mi vida he tenido el interés de observar a una pareja cómo fornican; esta fue una de ellas. ¡Impresionante!
Fragmento de Eros Desarmado
No todo es sudor bajo las sábanas, porque luego vienen otro y otro cuentos que inspiran vida, un impresionismo desbordado, jugando con nuestra incertidumbre, ahogando penas y salvando tempestades. Ocho cuentos desbocados, a mi modo de ver, demoledores: causan inquietudes, fraguan una guerra entre el deber y la anarquía, la moral y el desenfreno, la sobriedad y la embriaguez. Además, en el cuento “Cuerpos”, el jugueteo del que García Márquez ya afirmaba, que con las palabras se intercambian complicidades entre los escritores y sus lectores. Aquí Günther fascina, meciendo a voluntad el tiempo y el espacio entre el creador, el escritor y los personajes de su historia, pasando de la ficción a la ficción dentro de un espejo infinito de reflejos. Empuja a la metaficción directamente, mientras nos obliga a madurar detalles que fluyen sin cesar entre las letras mientras viajan entre el creador y el lector.
El autor es, por si fuera poco, un activista en defensa del patrimonio histórico de la milenaria ciudad de Cholula, académico y catedrático de la Universidad Iberoamericana.
El libro es nuevo. Escuché, como les dije, sobre su presentación en Profética (Puebla, Pue.), la librería del CCU o la librería de La Ibero Puebla; desconozco si lo venden en las diferentes familias de libreros del país, pero si te interesa y estás fuera de Puebla, escríbeme que conozco el correo personal del autor. Podemos ver cómo hacértelo llegar (la librería mencionada también puede enviarlo a domicilio). Mientras, te dejo una liga de otros cuentos del mismo autor. Espero los disfrutes tanto como lo he hecho yo. Bibliografía de Günther.
Aquí les dejo una entrevista que le realicé a Günter Petrak
[…] excelentes escritores como Elena Garro (esposa de Octavio Paz), Ángeles Mastreta, Fritz Glockner, Günther Petrak, Pedro Ángel Palou y desde luego, Sergio Pitol. Tuvo malaria en su niñez y estuvo varios años […]