Comparte:

Frases célebres sobre Disciplina

William Feather

«Si no nos disciplinamos, el mundo lo hará por nosotros.»  – William Feather (1889-1981). editor y autor estadounidense, nacido en Jamestown, Nueva York, Feather se mudó con su familia a Cleveland en 1903. Después de obtener un título de la Western Reserve University en 1910, comenzó a trabajar como reportero para Cleveland Press. –Pajares y chimeneas «(1923) y –Los ideales y las locuras de los negocios (1927).

George Washington

«Disciplina es el arma del ejército. Hace a los pequeños grupos formidables, procura el éxito de los débiles, y la admiración para todos.» – George Washington (1732-1799) primer presidente de los Estados Unidos entre 1789 y 1797​​​ y comandante en jefe del Ejército Continental revolucionario en la guerra de la Independencia de los Estados Unidos. En los Estados Unidos se le considera el padre de la Patria. –Reglas de civilidad y –Diario de George Washington.

Fragmento literario sobre Disciplina

Homero

Homero (S. VIII a. C.) es el nombre dado al escritor griego antiguo a quien tradicionalmente se le atribuye la autoría de las principales poesías épicas griegas: la Ilíada y la Odisea.

.

Ulises y las sirenas (fragmento) Homero

Súbitamente cesó la brisa y una calma total se extendió sobre las olas, adormecidas por algún dios. Mis compañeros se levantaron, arriaron las velas y las depositaron en el fondo de la nave, y sentándose a los remos hicieron blanquear las aguas bajo las palas de pino. Entre tanto, con mi puñal de bronce partí una gran torta de cera; luego amasé y moldeé los pedazos con mis manos (…) De banco en banco fui taponando los oídos de mis compañeros. Luego, ellos me ataron pies y manos y me amarraron al mástil de pie sobre la carlinga y volviéndose cada uno a su puesto batieron con los remos las olas que blanqueaban bajo los golpes y la nave llegó al alcance de las voces. Navegábamos velozmente, pero las Sirenas advirtieron la presencia de la ligera embarcación que navegaba muy cerca de ellas y con sus frescas voces entonaron un cántico: “¡Ven aquí acércate a nosotras, Ulises tan elogiado, honor y gloria de la Acaya!… Detén tu nave y ven a escuchar nuestras voces. Jamás un negro navío dobló nuestro cabo sin oír las dulces melodías que salen de nuestros labios. Después de deleitarse con ellas, quienes las escucharon se van alegres conociendo muchas cosas que ignoraban, pues nosotras sabemos todas las penalidades que los dioses infligieron en la guerra de Troya a los argivos y a los troyanos y estamos enteradas de cuanto ocurre sobre la tierra”. Así cantaban, y sus admirables voces llenaban mi corazón del deseo de escucharlas. Frunciendo las cejas, hice una seña para dar a mis compañeros la orden de desatarme, pero mientras los remeros curvados sobre los remos seguían bogando, Euríloco y Perímedes se levantaron para apretar más los nudos que me sujetaban. La nave se alejó y pronto se dejaron de oír los gritos y los cantos de las Sirenas. Sólo entonces mis fieles compañeros soltaron mis ligaduras y se quitaron la cera que les tapaba los oídos. Canto XII (fragmento)

Accede aquí a diversos artículos sobre la Educación Moribunda en el mundo.

Accede aquí a diversas películas y series que te recomiendo.

Te recomiendo el anecdotario de escritores

Por Joe Barcala

José Luis García Barcala, Joe Barcala, es Maestro en Literatura y Licenciado en Comunicación. Nace el 6 de septiembre de 1967 en el Puerto de Veracruz. Tiene 8 obras publicadas y publica en distintos espacios.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *