Comparte:

El Sistema de Administración Tributaria (SAT) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP) trabaja al ritmo de un programa de computadora equiparado al Windows 95.
Cierto es que los contribuyentes necesitan actualizar sus datos cada cierto período, aunque, si generan facturas diariamente ¿será eso necesario? Cada nueva factura generada resulta ser un refrendo de la vigencia de un negocio o de un individuo con actividad profesional.

Sus atiborradas oficinas de «servicio», si se pueden llamar así, son simples tramitadoras de papeleo que ellos mismos generan con su normatividad de funcionamiento. Sus portales de internet son más confusos que mi contador y eso ya es mucho decir.

Como ejemplo, si se vencen tus archivos de registro digital, terminarás vomitando. Es típico que acaben su vigencia el mismo día que se vence tu firma electrónica, pues por lo general la gente tramita todos el mismo día y tienen la misma duración: 4 años.

Si la firma, no podrás renovar los demás y ese es el círculo vicioso. Debes descargar un programa que se queda trabado como internet cuando funcionaba con teléfonos por horas… ¡Nunca se validan! y su interfaz es tan anticuada como ineficiente.

Si yo le pidiera a mis clientes que, para poder comprarme deben tener pasaporte, visa, acta de matrimonio y defunción, no me compraría nadie. Aquí parece lo mismo, el SAT quiere que le ruegue de rodillas, previa letanía de plegarias, que me permitan por favor, de la manera más atenta, si a sus majestades no les causa inconvenientes que ¡Me dejen pagar impuestos!

Tal parece que solicitan a los contribuyentes que evadan impuestos para no darles trabajo. Así, ellos serían felices y nosotros lloraríamos porque deseamos fervorosamente pagarles los impuestos correspondientes.

Opina, por favor.

Por Joe Barcala

José Luis García Barcala, Joe Barcala, es Maestro en Literatura y Licenciado en Comunicación. Nace el 6 de septiembre de 1967 en el Puerto de Veracruz. Tiene 8 obras publicadas y publica en distintos espacios.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *