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Las investigaciones que la autoridad realiza sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa no están fallando. Durante estos dos años hemos visto un desfile de estudios sobre las versiones oficiales que terminan siempre desmentidas por los investigadores: cuando se habló de que hubo un incendio de gran magnitud, científicos de la UNAM explicaron que debido a la lluvia del día 27 de septiembre no pudo tener lugar. Cuando Jesús Murillo Karam, el entonces procurador, basado en testimonios falsos, explicaba la forma en que los cuerpos de los estudiantes fueron incinerados, llegó el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) a desmentir nuevamente al estado sobre esa versión.

ayotzinapa_43_logoNo están fallando

Nuevamente vimos cómo en la búsqueda de los cuerpos aparecieron infinidad de fosas clandestinas que terminaron cancelando esa triste pero inevitable tarea para seguir dándole largas al tema. Nos debe quedar claro que las investigaciones de la PGR no están fallando, sólo están sirviendo para darle vueltas y evitar que se sepa la verdad. Diferentes instancias nacionales e internacionales han declarado que se debe abrir el caso de la zona militar y conocer la verdad de lo que sucedió. En todos los casos, el gobierno se ha negado. Sin embargo, los investigadores, una vez más, han presentado evidencias de la participación del ejército en la desaparición de los estudiantes, presentando vídeos y la geolocalización de las llamadas de celular de los propios estudiantes.

Ayotzinapa: ¿Dónde están los 43?

¿Por qué entonces seguimos sin saber a ciencia cierta lo que sucedió aquella fatídica noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala? Murieron 6 y desaparecieron los 43 y ¿no sabemos nada? Apenas unas cuántas desviaciones del tema que no dejan satisfechos a los padres de los normalistas ni a la comunidad científica ni a la sociedad en general. Siguen callando.

Ex procurador Pablo Chapa
Ex procurador Pablo Chapa

Casos previos

No es la primera ocasión que el Estado Mexicano pretende desviar la atención de las investigaciones sobre hechos lamentables donde se sabe de la participación de instancias oficiales. ¿Recuerdan el caso de la vidente conocida como “La Paca”? Se investigaba el homicidio del cuñado de Carlos Salinas de Gortarí y que fuera líder del PRI, José Francisco Ruiz Massieu. El procurador Pablo Chapa Bezanilla seguramente la contrató para fingir que aparecía el cuerpo del diputado Muñoz Rocha, a quien culpaban del homicidio y la vidente conocida como La Paca supuestamente encontró el cadáver. Luego se supo, no era del diputado y ella fue acusada de sembrar la osamenta, cumpliendo una pena de 12 años por ello.

Foto; ADN político, Los dos Aburto
Foto; ADN político, Los dos Aburto

También supimos que hubo varios “Marios Aburto” implicados en la escena del crimen de Luis Donaldo Colosio Murrieta, candidato entonces del PRI a la presidencia de la República. Así está sucediendo con el caso de los normalistas de Ayotzinapa: mentiras históricas, desvío de la atención con testigos falsos, enviar de vuelta a sus países a los miembros del GIEI porque le incomodaban a Peña Nieto sin haber terminado la investigación y sin conocerse la verdad en cuanto al paradero de los desaparecidos.

El sistema es el problema

Esta es otra de las patrañas, engaños y embustes al estilo del viejo PRI, el sistema caduco y corrupto que gobierna a México desde que el infierno se estableció aquí. Triste nuestra calavera si seguimos creyendo que son un grupo de buenas personas. Ayotzinapa es uno más de los engaños, es una muestra más de la burda teatralidad mediática con que se estupidiza a la población. Votar por ellos debe ser declarado un acto ilegal, subversivo, homicida, actos ellos contra la realización plena y el progreso de nuestra nación.

Por Joe Barcala

José Luis García Barcala, Joe Barcala, es Maestro en Literatura y Licenciado en Comunicación. Nace el 6 de septiembre de 1967 en el Puerto de Veracruz. Tiene 8 obras publicadas y publica en distintos espacios.

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