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El corrupto partido del presidente Peña Nieto, el PRI, promueve con spots de radio y televisión el posicionamiento de José Antonio Meade, un funcionario público que desea hacer una campaña ciudadana, pero no despega. Hay muchas razones para entender su rezago en el posicionamiento dentro de las encuestas, muchas lo ponen en 3er lugar, con apenas un 13% de votos a su favor.

Estas son los 10 motivos que lo mantienen en un nivel marginal junto a otros candidatos:

1. El dedazo: quedó claro que el personaje es candidato del PRI gracias a que el presidente corrupto del país, Enrique Peña Nieto, lo ha querido como sucesor. Eso implica complicidad y compromiso de protección ante los crímenes del ahora presidente por el candidato.
2. El falso ciudadano: Meade se ha auto nombrado ciudadano cuando lleva 5 cargos como secretario de estado. Para poder ser ciudadano es necesario no participar en cargos públicos y eso lo convierte en un mentiroso, en un lobo que se esconde bajo la piel de las ovejas.
3. El gasolinazo: Desde que se supo extraoficialmente que Meade sería el candidato del PRI, las redes sociales han procurado recordar a la población que el autor intelectual de los gasolinazos desde la Secretaría de Hacienda fue él. No es un falso rumor, José Antonio Meade en realidad ha defendido la idea del incremento a las gasolinas en diferentes medios masivos. Eso le resta de inmediato muchos puntos.
4. El neoliberalismo: esta corriente económica, generada desde la llamada «Escuela de Chicago» busca vender las empresas del gobierno (como lo hizo Salinas de Gortari), facilitar la competencia libre del mercado sin proteccionismos estatales lo que trajo como consecuencia una ampliación de la brecha entre ricos y pobres como nunca antes. Meade es defensor de ese manejo económico a nivel macro.
5. El PRI: simplemente por ser candidato del partido dictatorial que ya conocemos de lamentables experiencias previas, y la más reciente quemada con Peña Nieto, además de 22 gober-ladrones que saquearon a sus estados, la mayoría de ese nefasto partido, es para tener todo en contra. Quizá Meade podría haber sido una buena apuesta en otro partido (que no forzosamente una buena persona), pero con el PRI, se quemó solo.
6. Sin elección previa: cuando un candidato apuesta por la presidencia, al menos debería haber estado en una boleta electoral previamente. Meade no ha sido nunca antes un candidato postulado a algún cargo de elección popular. No tiene bases que le apoyen, no se ha responsabilizado por dar resultados a ningún electorado anteriormente.
7. Apoyo incondicional a EPN: En distintos vídeos circula su alabanza constante a Peña Nieto. Esa es una muestra de lo equivocado que está. No se ha dado cuenta que no sólo EPN tiene la peor popularidad de la historia en un presidente, sino que en realidad ha difundido la corrupción, ha quebrado al país, dejándolo con una deuda enorme en sólo 5 años, ha mostrado en múltiples ocasiones su ineficiencia como político y gobernante y ha mentido en varias cosas a la nación.
8. Defensor de las reformas: También Meade ha dejado constancia en varias entrevistas su apoyo incondicional a las reformas de Peña Nieto. De ellas, la población mostró en su mayoría, un disgusto por la aprobación de las mismas. Eso es no pensar en la ciudadanía, eso es pensar con la cabeza de un neoliberal, de un aristócrata comprometido con su casta de ladrones.
9. Cómplice de saqueos: antes de ser nombrado como Secretario de Desarrollo Social, la antes perredista Rosario Robles, ocupaba el mismo cargo. Ella fue acusada por el saqueo de dicha dependencia y Meade encubrió el robo que ella hizo. Lo mismo frente a la acusación a Josefina Vázquez Mota, excandidata panista a la presidencia, con un desvío de recursos por medio de su asociación civil Juntos Podemos, con supuestos apoyos a migrantes en EUA por mil millones de pesos. Meade pudo llamarla a cuentas desde la SHCP, pero no sucedió nada.
10. Elba Esther: La lídereza del SNTE, la Gordillo, ha obtenido recientemente su traslado a cumplir prisión domiciliaria gracias a un pacto con el PRI, debido a que ambos partidos (PRI-Nueva Alianza) van a defender a Meade en la boleta electoral.

Es este manejo lo que no permite a Meade subir en las encuestas y ya se rumora su cambio, el reemplazo que el PRI quiere hacer para mejorar su posicionamiento en las encuestas. Se nota en las noticias, en los trasfondos, la desesperación de la élite gubernamental por el inminente liderazgo que ejerce desde hace algunos años, el principal contendiente izquierdista a la presidencia: Andrés Manuel López Obrador.