Los compadres que permiten la impunidad del presidente

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Si ya se sabe la larga lista de crímenes que se le imputan al presidente de México, sabiendo que pretendía ocultar con su verdad histórica los acontecimientos en torno a la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, al aceptar como soborno de Grupo Higa una residencia de 7 millones de dólares, al ocultar la evidencia de Tlatlaya donde el ejército asesinó a 26 personas y fue encubierto por autoridades federales y estatales, al imponerse como presidente usando hackers y pagando favores a Televisa descontando impuestos por millones…

E N T O N C E S

¿Es valido tener tratos con los criminales? Desde luego que no. Se considera complicidad a quienes sabiendo la verdad, no la comunican a las autoridades competentes. Por tanto, quedan como cómplices todos aquellos políticos, mandos policíacos, gobernadores, legisladores, jueces y demás personas relacionadas de algún modo con cada uno de los crímenes del presidente. Hacer tratos con él o respetar lo que se llama «su autoridad» es promover la impunidad. Presentarse en sus actos públicos o saludarle en el camino es igualmente un acto repugnante que pone en evidencia el interés de quienes hacen coba por obtener favores de él o aprovecharse del trato con él para ganar popularidad con los amigos. ¡Es ridículo! Es igual que lo sucedido con Kate del Castillo, quien habló de forma afortunada o desafortunada con el Chapo; en las entrevistas que concedió después de conocerse su encuentro con el capo de la droga, dejó ver su interés por obtener financiamiento para realizar una película.

No tiene la culpa el indio sino el que lo hace compadre. – Refrán popular.

Los criminales no tienen derecho a pasear por las calles. Sobre ellos pesan órdenes de aprehensión y deben caminar cuidándose las espaldas. Aunque legalmente sabemos que el presidente tiene fuero por su cargo, moralmente sabemos que es una persona non grata, un tipo despreciable a todas luces que no merece tener el buen trato de nadie. Algunos pensarán que es «presunto culpable» o quizá peor, «no se le ha demostrado nada», pero eso es incorrecto; la lista de arriba es muy pequeña comparada con la gran cantidad de delitos que ha cometido de forma evidente y otras más que deberían investigarse obligatoriamente, pero que por su influencia y poder, no ha permitido, ha desviado la atención y ha comprado el silencio de muchos, incluso ha impulsado -lease comprado- leyes para poder hacer su voluntad, enrique-ciéndose, pasando alevosamente sobre la voluntad popular y la real conveniencia de la nación.

Una dictadura es un estado en el que todos temen a uno y uno a todos. – Alberto Moravia.

En un país con menos corruptos, habría sido repudiado ya por la CONAGO (mafia de gobernadores), por los medios masivos de comunicación (mafia también), se le cerrarían las puertas de las empresas (otro grupo que compra leyes a su conveniencia contra la nación), los legisladores habrían pedido explicaciones (obviamente están protegiéndole), los jueces le habrían mandado a declarar (se puede ver que están en el mismo círculo). Esa es la razón por la que el cien veces despreciable personaje puede caminar a lo largo y ancho del país obteniendo favores y dejando claro a todos los políticos, medios y leguleyos que la impunidad es premiada siempre que sigan con la complicidad de felicitar al presidente por sus actos.

Y la lista de males es por todos conocida, desde abrirle la puerta a su padrino político Carlos Salinas de Gortari, hasta desaparecer periodistas que se atrevieron a cantarle las verdades, ventilando su alta capacidad de corrupción; y de ahí también el hecho de coartar la libertad de expresión de gente comprometida con la verdad, como Aristegui. Pese a ese esfuerzo por invertir en la imagen presidencial derrochando la cantidad más alta de millones en ese rubro de toda la historia, hoy día todo se sabe, tarde o temprano, como los wikileaks, los anonimus y hasta una que otra ventilada de información en época electoral de los programas sociales al servicio del partido más repudiado de la historia, el de este presidente; PROGRESA, le llaman al programa social y PRI al partido.

Es evidentemente un criminal con cada una de sus letras, se le ha denunciado judicialmente, la población molesta ha mostrado una y otra vez que no está de acuerdo con que siga siendo el presidente, los focos rojos del país arden cada fin de semana, la ola de muertos y desaparecidos abruma, las arcas nacionales están perdiendo 2 mil millones de pesos diariamente desde que inició su sexenio. Sus reformas han sido rechazadas una y otra vez por grupos sociales, activistas, afectados por esas leyes y se está usando la fuerza pública para reprimir el deseo de los ciudadanos, hartos de sus falacias, de sus abusos, del saqueo, de la pésima administración de todo lo relacionado a su gobierno: programas sociales, salud pública, políticas educativas, empresas públicas como PEMEX, inseguridad, relación de los políticos con el crimen organizado, etc. Debe declararse que, ante estas circunstancias, nadie debe permitir que el señor pueda caminar libremente por los edificios de esta nación, se le debe repudiar al verle pasar; todo político que se precie de representar al pueblo con dignidad, debe hacer valer el deseo ciudadano de enjuiciarlo y meterle preso a la brevedad posible.

Y no, no es un asunto de berrinche de unos cuantos. Sería un tremendo error considerar que sólo la oposición le está indicando el rumbo fallido de su administración. Recientemente los miembros del GIEI le mostraron la falsedad de sus hipótesis en el caso Ayotzinapa; con ellos, varios organismos internacionales, gobiernos y líderes mundiales han hecho un llamado para detectar por qué el gobierno de este presidente ha pretendido desviar la atención, porqué no se ha investigado al batallón 27 del ejército con sede en Iguala, por ejemplo. Las noticias internacionales, a lo largo de estos tres años han sido bloqueadas en México como parte de ese ataque inagotable a la libertad de expresión de este gobierno. Incluso líderes sociales en México han sido encarcelados como Nestora Salgado o el Dr. Mireles, porque el gobierno está empeñado en un plan claro de imponer su voluntad contra quien sea, con quién sabe qué malévolos fines.

Este es un llamado a toda la clase política: deben obstaculizarle, con base en lo expuesto, todas las acciones que realice este gobierno pervertido que ha causado mucho daño. No quemen su carrera política por ganar un hueso, porque definitivamente los mexicanos hemos despertado y estamos comprometidos con un mejor futuro para nuestros hijos y no vamos a perdonar a ninguno que sea comparsa de este gobierno criminal, al menos hasta que demuestre lo contrario en un juicio justo y abierto, transparente a la ciudadanía que es quien, a todas luces, le condena diariamente, en las redes, en las calles, en el rechazo, en las marchas, en las denuncias y en algunos medios libres o independientes del sistema. Ayuden a detener el genocidio, el ecocidio, la devaluación del país, las desapariciones, las componendas con los capos… estamos sufriendo severamente este retorno de la dictadura de partido.

 

Te invito a conocer mi trayectoria aquí.

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