Prometieron que México sería un país desarrollado
Ya sabemos que creer a los políticos sale muy caro. Veamos un balance de la realidad, México está en realidad mucho peor de lo que estábamos antes de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio. Seríamos, prometieron, un país del primer mundo. Lo que no dijeron es que era un maldito experimento que unía comercialmente a países muy distintos.
Si Donald Trump pidió la renegociación del TLC en realidad debería beneficiarnos. Estamos en un agujero negro. Si a los estadounidenses les fue mal, según él, espere ver lo que le pasó a México. El TLC es un acuerdo comercial neoliberal, en busca de nuevos mercados para algunos grupos económicos poderosos.
El Tratado de Libre Comercio en el campo
Los campesinos vendieron o abandonaron sus tierras y las ocuparon los maleantes y más de un político interesado en buenos negocios. El Estado ya no financiaba, ni regulaba al campo (ideal neoliberal de permitir la competencia totalmente liberada), ni promovía la economía rural.
Se dispara el desempleo y la migración
Millones de campesinos migraron a las tierras estadounidenses, a las granjas de las grandes industrias que ahora necesitaban mano de obra barata. Muchos se quedaron también sin empleo en México, los grandes negocios ahora se encontraban del otro lado de la frontera.
En 2004, más de 100 mil hectáreas ya eran sembradas con drogas. Hoy son más de 200 mil hectáreas. Eso no se puede esconder ya. Miles de toneladas de droga viajan a Estados Unidos y otros países, incluidos europeos, y lo tienen que hacer, necesariamente, con la complicidad de las autoridades. No hay de otra. Al mismo tiempo, los narcos ya están metidos en la política, para asegurar sus negocios. Ya son lo mismo.
1990-2011
- Se reduce el 40% del área sembrada en oleaginosas
- Se reduce al 50% la producción de soya
- 70% menos producción de arroz
- De frijol perdimos el 40% de la producción también.
Promesas incumplidas nuevamente
Se prometió que alcanzaríamos la autonomía alimentaria pero en el mismo periodo pasamos de importar 2 millones de dólares en alimentos (8.8 millones de toneladas) del campo a 30 millones (29.26 millones de toneladas). El 30% del maíz que consumimos hoy es importado. Ahora el 46% de lo que consumimos en México, es importado; antes del Tratado de Libre Comercio sólo importábamos el 24%.
Exportamos un dolar de alimentos por cada 4.5 dólares que compramos en el mismo concepto.
Mucho del alimento que importamos es chatarra, de pocos nutrientes y eso ha incrementado la obesidad del pueblo mexicano. Además los precios de la canasta básica dependen ya del extranjero y se han incrementado y la consecuencia es el aumento de la miseria. Hoy, más del 60% de la población vive en pobreza, pasa hambre.
Pobreza alimentaria
La leche y sus derivados también sufrieron la pérdida de 700 mil pequeños productores que no pueden competir con las grandes empresas que importan a México sus productos.
Los precios de los productos suben libremente, justificados por el incremento internacional, pero los salarios se mantienen en un tope y esos no pueden subir más que una pequeña fracción al año. Hay que recortar la canasta cada año con lo que se llega a la pobreza en poco tiempo.
Hay además una cadena de incrementos al subir los precios de los productos del campo, pues los alimentos como el pollo, el cerdo y el ganado vacuno se alimentan de esas semillas. Así, sube el huevo, la leche, la carne y lo demás en cadena.
El medio ambiente
Se incrementó la explotación de los recursos naturales para poder competir con el extranjero y con ello aumentó la degradación de nuestras tierras. El 64% ya están degradadas por la contaminación de los mantos acuíferos. Cada año se pierde la ganancia que producían 10 mil hectáreas de las mejores tierras mexicanas.
Desde la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio, se han perdido 225 mil hectáreas de tierra que producía y que ha perdido su calidad por falta de agua, por falta de árboles, por sobre explotación en la extracción de recursos. Según la OCDE, México es el país que más pierde bosques.
La industria
No se detonó el crecimiento de la tecnología. Nuestro superávit son a costa del déficit. Aún no hay medidas estatales para regular la importación de tecnología e insumos.
Aumentamos 231 mil millones de dólares en el periodo 1990-2012 en la importación de insumos intermedios. No se han creado los programas de impulso a la profesionalización de la industria. También incrementó el empleo informal.
Donald Trump pude quejarse
Las reformas de Peña Nieto dentro de 23 años estarán en un balance igual, una desgracia para nuestro país. Nos estamos quemando al país, llegando a un nuevo TLC que nos va a perjudicar aún más, ahora con la agresividad de Trump. Nos están condenando a morir de hambre. México así, en manos de neoliberales y narcotraficantes vendiendo la patria a los Estados Unidos.